Ataque israelí en Líbano deja 558 muertos, incluyendo 50 niños

Un devastador ataque con misiles en Líbano, atribuido a Israel, dejó un saldo de 558 personas muertas, entre ellas 50 niños, en lo que se considera uno de los días más sangrientos en la región desde 1975, durante la guerra civil libanesa. La ofensiva, que ocurrió el lunes 23 de septiembre, ha sido calificada como un punto crítico en el conflicto entre Israel y Hezbollah, el grupo paramilitar libanés.

El ataque fue dirigido hacia mil 600 objetivos de Hezbollah, según declaraciones de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). No obstante, el Ministerio de Salud de Líbano reportó que entre las víctimas había un gran número de civiles, incluyendo mujeres y personal médico. Este ataque aéreo marca una nueva escalada en la violencia en la región, generando preocupación a nivel internacional por la cantidad de bajas civiles.

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, defendió la ofensiva, señalando que busca cambiar el equilibrio de poder en el norte de Israel, refiriéndose a la frontera con Líbano. “Prometí que cambiaríamos el equilibrio de seguridad, el equilibrio de poder en el norte, y eso es exactamente lo que estamos haciendo”, dijo Netanyahu en una declaración pública.

El ataque también dejó aproximadamente mil 600 heridos, lo que ha provocado el desplazamiento de miles de personas hacia el norte del país. Las autoridades locales estiman que más de cien mil personas han sido desplazadas de sus hogares. Muchos de los habitantes del sur de Líbano decidieron evacuar incluso antes de que se concretara la ofensiva, tras recibir mensajes de advertencia de las fuerzas israelíes a través de mensajes de texto y la interceptación de una emisora de radio libanesa.

A pesar de las advertencias, el margen de tiempo para evacuar fue escaso, y el ataque comenzó casi de inmediato, dejando a muchos atrapados en medio del fuego. Los residentes de Líbano temen que los ataques continúen, dado que esta mañana, alrededor de las 5:30 horas, las FDI anunciaron el lanzamiento de una nueva tanda de misiles contra objetivos de Hezbollah en el sur del país.

La Asamblea de Naciones Unidas ha expresado su preocupación por la creciente violencia y el alto número de víctimas civiles. Mientras tanto, diversas organizaciones humanitarias intentan atender la crisis de desplazados y brindar asistencia médica a los heridos.

La situación sigue siendo tensa y no se vislumbra un cese inmediato en las hostilidades, lo que ha generado comparaciones con los ataques recientes en Gaza, donde también se registraron numerosos civiles afectados por las ofensivas israelíes.

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