Corea del Norte reabre sus puertas al turismo internacional

Si están planeando sus próximas vacaciones y buscan un destino fuera de lo común, Corea del Norte podría estar en su lista.

A partir de diciembre de 2024, el país gobernado por Kim Jong Un permitirá nuevamente la entrada de turistas extranjeros, después de un cierre de fronteras que duró cuatro años debido a la pandemia de COVID-19.

Antes de 2020, viajar a Corea del Norte ya era un proceso complicado. Los turistas necesitaban permisos especiales, un contacto residente en el país, una revisión de antecedentes criminales, y solo podían ingresar en fechas restringidas y bajo la supervisión de agencias de viajes aprobadas por el gobierno norcoreano.

Estas restricciones hicieron que, en promedio, solo 5 mil personas visitaran el país cada año, una cifra que contrasta fuertemente con los más de 42 millones de turistas que México recibe anualmente.

Sin embargo, la pandemia llevó a Corea del Norte a cerrar sus fronteras completamente a los turistas internacionales, una medida que ha mantenido hasta ahora.

La reapertura en diciembre es un antes y después en la política del país, permitiendo a los aventureros considerar este destino para sus próximas vacaciones.

Aunque Corea del Norte no es conocida por sus atracciones turísticas tradicionales, quienes se animen a visitar el país podrán explorar la capital, Pyongyang, y la recientemente inaugurada ciudad de Samjiyon, que promete ser una de las paradas principales en los tours ofrecidos.

La agencia de noticias Reuters ha confirmado que las agencias de viajes especializadas en Corea del Norte retomarán sus tours a partir de diciembre, brindando a los turistas una oportunidad única de experimentar la vida en uno de los países más herméticos del mundo.

Aunque el viaje estará lejos de ser una experiencia convencional, podría resultar en unas vacaciones verdaderamente inolvidables para quienes buscan algo diferente.

Así que si buscan un destino que desafíe lo habitual y están dispuestos a enfrentar los estrictos controles y limitaciones que acompañan a un viaje a Corea del Norte, este diciembre podrían estar empacando para una de las aventuras más inusuales del planeta.