
Fallece Sammy Basso, el científico que luchó contra la progeria y se convirtió en un símbolo de esperanza
Sammy Basso, un destacado científico italiano de tan solo 28 años, falleció repentinamente mientras cenaba en un restaurante de Treviso, Italia. Su partida fue confirmada en las redes sociales de su Asociación Italiana Progeria Sammy Basso, donde se le homenajeó con un conmovedor mensaje: “Hoy nuestra luz, nuestro guía, se ha apagado. Gracias Sammy por habernos hecho partícipes de esta vida maravillosa”.
Basso padecía progeria, una enfermedad extremadamente rara que provoca un envejecimiento prematuro severo, diagnosticada desde que tenía apenas 2 años. Nacido en Schio en 1995, Sammy decidió dedicar su vida a investigar su propio síndrome, convirtiéndose en una voz influyente en la lucha contra esta condición, que afecta aproximadamente a 1 de cada 20 millones de personas.
Desde la infancia, Sammy mostró una admirable determinación. A los 10 años, con el apoyo de sus padres, fundó la Asociación Italiana Progeria, con el objetivo de visibilizar su enfermedad y recaudar fondos para la investigación de tratamientos. Su historia inspiradora lo llevó a ser elogiado en entrevistas, reportajes y documentales, siempre con una actitud positiva que reflejaba su carácter resiliente.
Sammy Basso se graduó en Ciencias Naturales en la Universidad de Padua en 2018, donde presentó una investigación sobre tratamientos para frenar el avance de la progeria. Posteriormente, se especializó en Biología Molecular en 2021. Su labor fue reconocida con el premio “Ciencia y Medicina Sam Berns”, en honor a otro paciente con progeria que visibilizó la enfermedad antes de su fallecimiento a los 17 años.
El presidente italiano, Sergio Mattarella, también le otorgó el título de Caballero de la Orden del Mérito, reconociendo su valioso trabajo y contribución a la ciencia y la sociedad. A pesar de vivir entre cirugías y tratamientos, Sammy siempre se presentó con una sonrisa, convirtiéndose en un ejemplo de vida para aquellos que enfrentan desafíos similares.
Con un pronóstico de vida de solo 15 años para los afectados por progeria de Hutchinson-Gilford, el legado de Sammy Basso como el paciente más longevo con esta condición resuena como un mensaje de esperanza. “Estamos profundamente agradecidos por el privilegio de haber compartido con él una parte de nuestro camino. Nos enseñó a todos que, aunque a veces los obstáculos de la vida parezcan insuperables, merece la pena vivirla plenamente”, concluyó su Asociación en un emotivo mensaje de despedida.