
Inundaciones en Texas dejan 78 muertos y varias personas desaparecidas
Texas enfrenta uno de los desastres naturales más devastadores de los últimos años. Las intensas lluvias que azotaron el estado durante el fin de semana provocaron el desbordamiento del Río Guadalupe, dejando al menos 78 personas muertas y un número aún indeterminado de desaparecidos, entre ellas 10 niñas que participaban en un campamento de verano.
Las autoridades reportaron que en pocas horas cayeron hasta 25 centímetros de lluvia, una cantidad que normalmente se espera en todo un mes. La comunidad de Hunt, por ejemplo, recibió más de 16 centímetros en solo tres horas. Las consecuencias han sido trágicas: calles inundadas, casas destruidas, cortes de electricidad y pérdidas humanas.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, declaró el estado de desastre en 15 condados y anunció el despliegue de 900 rescatistas, además de helicópteros y drones para continuar con la búsqueda. “Texas no se detendrá ante nada para garantizar que se dé cuenta completa de cada persona desaparecida”, afirmó.
Uno de los casos más alarmantes es el del grupo de niñas del Camp Mystic, un campamento cercano al río que fue arrasado por la corriente. Las labores de rescate continúan con la esperanza de encontrarlas con vida.
Mientras tanto, el gobierno de México ofreció albergues y condolencias a los afectados, y el embajador de Estados Unidos en nuestro país, Ronald Johnson, agradeció el gesto: “Nuestros pueblos siempre han estado unidos en los momentos que más importan”.
La tragedia ha dejado una profunda huella en el sur de Estados Unidos, y aunque las lluvias ya han disminuido, las autoridades alertan que cualquier nueva precipitación podría empeorar la situación. La reconstrucción apenas comienza.