La caída de ChatGPT significa más que una falla técnica
La caída de ChatGPT significa más que una falla técnica La reciente caída global de ChatGPT dejó a millones de usuarios sin acceso a esta herramienta de inteligencia artificial, causando frustración entre quienes dependían de ella para consultas, tareas o proyectos. Tanto en la versión web como en la aplicación móvil, los fallos impidieron enviar preguntas o interactuar con el chatbot. Según OpenAI, la interrupción afectó no solo a ChatGPT, sino también a su API y a «Sora», debido a problemas con un proveedor ascendente. En su página de estado (status.openai.com), la empresa aseguró que monitorea la situación y trabaja para resolverla. Los usuarios que enfrentaron problemas podían acudir a su plataforma de ayuda para reportar inconvenientes o buscar soluciones. Mientras ChatGPT permanecía inactivo, los usuarios exploraron opciones como: – Gemini de Google: Disponible en su página web y aplicación móvil, esta herramienta permite realizar múltiples tareas simultáneamente. Su versión experimental promete mayor rapidez y eficacia. – Copilot de Microsoft: Ideal para consultas iniciales sin registro, Copilot genera texto e imágenes usando IA de OpenAI y está integrado en el ecosistema de Microsoft. – Meta AI: Este chatbot de Meta está presente en WhatsApp, Facebook, Instagram y Messenger, permitiendo preguntas generales, entendiendo notas de voz, y generando imágenes. – Grok de X: Disponible en la red social X, este chatbot ofrece 10 consultas gratuitas cada dos horas, con acceso ilimitado para usuarios premium. La interrupción de ChatGPT evidencia la creciente dependencia de estas herramientas en la vida cotidiana. Si bien las alternativas cubrieron en parte las necesidades de los usuarios, la caída demuestra la importancia de diversificar las herramientas disponibles para evitar interrupciones en momentos críticos.
