La tragedia de Dante Emiliano: Un nuevo caso de violencia que indigna a México

Redacción

La violencia en México ha alcanzado nuevamente un nivel estremecedor con el caso de Dante Emiliano, un niño de 12 años que fue asesinado en Tabasco. Su desgarrador grito, “No me quiero morir”, se ha convertido en un eco de desesperación y un símbolo de la inseguridad que afecta al país.

El incidente ocurrió en el municipio de Paraíso, Tabasco. Dante Emiliano se encontraba cerca de la casa de su abuela cuando unos individuos intentaron secuestrarlo. Según testigos, el niño se resistió y el atacante, en un acto de brutalidad, le disparó tres veces en el abdomen.

Videos del momento, que se han viralizado en redes sociales, muestran a Dante Emiliano en el suelo, gritando de dolor y pidiendo ayuda mientras los vecinos intentaban socorrerlo con playeras para detener la hemorragia. Fue trasladado al Hospital Regional de Pemex, donde lamentablemente falleció horas después.

Dante Emiliano era un estudiante con buen rendimiento académico y un niño lleno de vida, recordado por sus maestros y conocidos por su buen humor y ocurrencias. Su trágica muerte ha dejado una profunda tristeza en su comunidad y una familia destrozada.

El Gobierno de Tabasco, ante la indignación nacional, realizó una reunión de emergencia para abordar la situación. Sin embargo, sus promesas de «priorizar las investigaciones» y «redoblar las estrategias» suenan vacías frente a la gravedad del caso. La Fiscalía General del Estado ha informado que sigue «varias líneas de investigación», pero hasta el momento no hay resultados concretos.

La respuesta del gobierno ha sido criticada por muchos que ven en estas acciones una falta de compromiso real con la seguridad de la ciudadanía. La ineptitud percibida de las autoridades para prevenir y responder adecuadamente a la violencia es un tema recurrente en la opinión pública.

El caso de Dante Emiliano se suma a una preocupante estadística: en promedio, 81 personas son asesinadas diariamente en México. Este año, los asesinatos de menores de edad han sido particularmente alarmantes, con un promedio de dos niños asesinados cada día. En el actual sexenio, más de 6 mil menores han perdido la vida a causa de la violencia.

La tragedia de Dante Emiliano coincide con unas declaraciones desafortunadas del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien afirmó que «ayuda mucho que la gente esté contenta» al referirse a la situación de violencia en el país.

Estas palabras han sido recibidas con indignación por muchos que sienten que el gobierno minimiza la crisis de inseguridad que enfrenta México.

La historia de Dante Emiliano es un doloroso recordatorio de la realidad que viven miles de familias mexicanas. La indignación y el dolor que ha generado este caso deben ser un llamado a la acción para las autoridades y la sociedad en general.

La violencia en México no puede seguir siendo ignorada, y es necesario un compromiso firme y efectivo para garantizar la seguridad de todos, especialmente de los más vulnerables.