
Misterio en Kansas City: tres fanáticos de los Chiefs hallados muertos
La alegría de los Kansas City Chiefs por llegar al Super Bowl LVIII se vio eclipsada por una tragedia: tres aficionados perdieron la vida después de una fiesta de celebración, desatando una serie de interrogantes entre los hinchasn pues las circunstancias que rodean las muertes aún no están claras, y aunque hay una persona detenida, las investigaciones no arrojan pistas contundentes sobre lo sucedido.
El individuo bajo custodia, Jordan Willis, organizó una fiesta para amigos entusiastas de los Chiefs, entre ellos David Harrington, Ricky Johnson y Clayton McGeeney. Sin embargo, después de la celebración del 7 de enero, las familias de estos hombres comenzaron a buscarlos desesperadamente al no tener noticias de ellos.
Cuando las autoridades llegaron al domicilio de Willis, se encontraron con una escena extraña: el hombre abrió la puerta en ropa interior y con una copa de vino en la mano. Posteriormente, los cuerpos de Harrington, Johnson y McGeeney fueron descubiertos congelados en el patio trasero.
A pesar del descubrimiento macabro, Willis no ha sido acusado de ningún delito y afirma no tener conocimiento de la presencia de los cuerpos en su propiedad. Alega haberse retirado a dormir después de la fiesta y haber permanecido incomunicado durante dos días con auriculares de cancelación de ruido.
Sin embargo, los familiares de las víctimas expresan su frustración por la falta de respuestas por parte de las autoridades. Jonathan Price, hermano de Ricky Johnson, cuestiona la actuación de la policía y exige claridad sobre lo sucedido.
Mientras tanto, el misterio que rodea la tragedia de los fanáticos de los Chiefs sigue sin resolverse, dejando un amargo sabor en medio de la celebración deportiva.