Björk y Rosalía colaboran en una canción inédita grabada hace 20 Años para luchar contra la piscicultura

Redacción

-La canción «perdida» de Björk y Rosalía se actualiza y se donarán las ganancias para apoyar la causa medioambiental en Islandia.

La destacada cantante islandesa Björk ha revelado detalles emocionantes sobre su colaboración con la estrella española Rosalía. La canción, que ha causado sensación en el mundo de la música desde antes de su estreno, resultó ser una pieza «perdida» grabada hace 20 años por Björk y fue reimaginada para abordar la problemática de la piscicultura en Islandia.

En una reciente entrevista con The Guardian, Björk compartió la historia detrás de esta canción y su preocupación por el medio ambiente. La canción original había sido grabada hace dos décadas, cuando Björk tenía aproximadamente 30 años. Redescubrió la pista en marzo y quedó intrigada por su sonido «extraño». A pesar de su naturaleza primitiva, la canción tenía influencias del dancehall jamaicano.

Con la intención de utilizar la canción para abogar por la causa medioambiental, Björk se acercó a Rosalía y la productora irlandesa-escocesa Sega Bodega para actualizar la pista y hacerla relevante para la audiencia contemporánea. «La forma de reactivar la canción para una plataforma medioambiental en 2023 sería conseguir un invitado que represente el momento», explicó Björk, la elección de Rosalía, con su exitoso enfoque en la música pop y su interés por las cuestiones medioambientales, fue perfecta para el proyecto.

A pesar de tratar un tema medioambiental, la canción en sí no es una protesta. Björk la describe como una «canción de amor» que no se centra en el pescado. Sin embargo, ambas artistas decidieron donar las ganancias de la canción a activistas que luchan contra la cría industrial de salmón en Islandia.

En un adelanto musical de su colaboración, Björk expresó su deseo de ser un ejemplo para otros que quieran ayudar en esta causa vital. La industria piscicultora en Islandia se ha enfrentado a críticas debido a las repetidas fugas de miles de peces a la naturaleza, y las artistas han asumido un papel activo en la sensibilización sobre este problema. Esta inusual colaboración promete no solo ofrecer una canción única sino también hacer una contribución significativa a la lucha por la protección del medio ambiente en Islandia.