En Peligro de extinción: Wallace y Gromit amenazados por cierre de fábrica de plastilina

El futuro de los icónicos personajes Wallace y Gromit está en riesgo debido al cierre de la fábrica Newclay Products, proveedora de la plastilina especial utilizada en la animación stop motion de los estudios de animación británica Aardman. La noticia ha desatado preocupación entre los fanáticos de esta entrañable pareja de personajes, conocidos por sus divertidas aventuras en cortometrajes y películas.

La empresa Newclay Products, responsable de suministrar la plastilina necesaria para dar vida a Wallace y Gromit, ha decidido cerrar sus puertas debido al escaso interés de otros en trabajar con este tipo de arcilla reforzada con nailon. Este inesperado giro pone en peligro la continuidad de las producciones protagonizadas por estos queridos personajes.

Aardman, fundada en 1972 por Peter Lord y David Sproxton, ha adquirido todo el material restante de Newclay Products, lo que proporciona un alivio temporal. Sin embargo, se plantea la incertidumbre sobre la viabilidad a largo plazo de la producción de Wallace y Gromit, ya que la plastilina adquirida puede no ser suficiente para mantener la calidad y cantidad necesarias para futuros proyectos.

La situación se complica aún más ante las declaraciones de los propietarios de la fábrica, quienes señalaron la falta de interés general en trabajar con este tipo de material, que implica horas de dedicación para lograr las animaciones caracterizadas por su meticulosidad y detalle.

Aunque Aardman cuenta con reservas de plastilina para los próximos dos años, ahora enfrenta el desafío de encontrar un nuevo proveedor que pueda suministrar el tipo específico de arcilla patentada por Newclay Products. Este material no solo es crucial para Wallace y Gromit, sino que ha sido utilizado en otras creaciones emblemáticas de Aardman, como el personaje Morph.

La búsqueda de un nuevo proveedor se convierte en una carrera contra el tiempo para los estudios Aardman, quienes deberán encontrar una solución que garantice la continuidad de sus producciones stop motion. En una era en la que la animación por inteligencia artificial gana terreno, la pregunta sobre el futuro de técnicas clásicas como el stop motion queda en el aire, generando incertidumbre en el mundo de la animación. Los fanáticos, por su parte, aguardan con ansias noticias sobre el destino de Wallace y Gromit y la posibilidad de salvar este proyecto que ha dejado una huella imborrable en la historia de la animación.