
¿Conoces el origen de las calaveritas?
Eduardo
Las festividades de Todos los Santos están a la vuelta de la esquina, y por eso queremos hablarte sobre una tradición literaria: las calaveritas.
Todo se remonta a 1792, cuando el franciscano Fray Joaquín Bolaños creó la calavera «La portentosa vida de la muerte».
En el siglo XIX, la calaverita literaria, tal como la conocemos, tuvo sus primeras apariciones. Sin embargo, la censura de la época colonial prohibiría este tipo de publicaciones y versos en gacetas y medios impresos.
Así es como se convirtió en una de las tradiciones más importantes de México, ya que fue una forma divertida de hablar sobre la vida de algún burgués que hubiera fallecido recientemente.
Años después, grandes personajes también quisieron dejar su huella con las calaveritas literarias. Uno de ellos lo vio de una manera visual y se inspiró en el trabajo de Manilla: el grabador José Guadalupe Posada.
Según CulturaUNAM y Casul, estos son los puntos a tener en cuenta para crear una calaverita literaria:
• Escoge un tema, una persona o incluso una situación que capture tu interés. Observa con detenimiento los rasgos y las exageraciones posibles relacionadas con el tema. Sumérgete en todo lo que implica dicha persona o situación; esto te ayudará a despertar tu creatividad. ¡Entre más ridículo, mejor, así que anótalo!
• Lleva todo a la ultratumba, al más allá: juega con las situaciones y los rasgos. Puedes ser pícaro, satírico, incluso algo insultante (pero sin pasarte). Evoca todo esto a través de rimas o versos de tamaño similar, manteniendo un ritmo constante. Siempre piensa en cómo quieres que se sienta tu lector o la persona a quien dedicas tu calaverita. ¡Y recuerda, entre más creativa, mejor!
• Como recordarás, el origen de la calavera se relaciona con el epitafio. Debes hablar del vivo como si estuviera muerto. A menudo, ayuda utilizar una situación de encuentro con La Catrina o La Flaca. Pero si te sientes como Fray Joaquín Bolaños y quieres que La Muerte sea el personaje principal, ¡aterroriza a tu público novohispano y ve a por ello!
• Finalmente, escribe, borra, entierra viva la rima y decora tu ofrenda con metáforas hasta que tu obra esté lista. ¿No es perfecta? No importa. Como nos recuerda el escritor Adán Cabral Sanguino, «Lo importante es reírnos un poco de ciertos políticos funestos que han hecho de México un cadáver económico y social».
Imagen de México Desconocido