Tribunal de Ecuador considera “legal, legítima y no arbitraria” la detención del vicepresidente, Jorge Glas

Redacción

Un tribunal de apelaciones de Ecuador ha revocado este viernes el recurso de ‘habeas corpus’ que solicitaba la liberación inmediata del exvicepresidente Jorge Glas, detenido en la Embajada de México en Quito a principios de abril. La corte consideró que la detención fue “legal, legítima y no arbitraria”.

Esta decisión revierte la sentencia del 12 de abril, que concedió parcialmente un ‘habeas corpus’ a favor de Glas. En aquel momento, la Justicia ecuatoriana calificó la detención como “ilegal, ilegítima y arbitraria”, aunque no aprobó su liberación debido a las sentencias condenatorias pendientes en su contra.

“Se ha corroborado que no ha existido detención ilegal formalmente, ni arbitraria; dentro de los límites que han sido analizados en esta acción constitucional de apelación de ‘habeas corpus’”, concluyeron los magistrados.

El tribunal también negó el argumento de la defensa de Glas, que sostenía que él tenía calidad de asilado. Los jueces afirmaron que “no existe documentación alguna que (lo) corrobore” y acusaron a la defensa de “desnaturalizar el ‘habeas corpus’” al insistir en una decisión sobre el derecho al asilo para “confundir” a la sala.

El expresidente Rafael Correa criticó la resolución a través de su cuenta en la red social X, argumentando que la detención de Glas es, en realidad, ilegal y arbitraria. “Se justifican en que hay estado de excepción y no rige la inviolabilidad del domicilio (¡Embajada!) y que ellos tienen que basarse en el Derecho nacional y no en el internacional, pese a que lo hecho es hasta un delito claramente tipificado”, denunció.

Correa también señaló la falta de transparencia del proceso, afirmando que “nunca notificaron la composición del tribunal de apelación” y que “jamás abocaron conocimiento”. Criticó que no se mencionaron los ‘amicus curiae’ presentados y que no se realizó una audiencia, lo cual hubiera sido deseable aunque no obligatorio.

La abogada de Glas, Sonia Vera, subrayó la opacidad del proceso legal, indicando que “no hubo audiencia” y que “nunca supieron) en qué tribunal recayó” la apelación presentada. Vera y su equipo buscaban la liberación de Glas de la cárcel de La Roca, en Guayaquil.

La Policía de Ecuador ingresó el 5 de abril en la Embajada mexicana en Quito, donde Glas se había alojado semanas antes, alegando temor por su seguridad. México había confirmado una operación policial que brindaría asilo político a Glas.

Una semana después, un tribunal declaró “ilegal y arbitraria” la detención, argumentando que carecía de sustento jurídico, basándose en los decretos del presidente Daniel Noboa sobre el estado de excepción y el conflicto armado interno.

Las autoridades de Ecuador acusan al exvicepresidente de malversación de caudales públicos, relacionados con los trabajos de reconstrucción en la provincia de Manabí tras el terremoto de 2016, que causó más de 670 muertos.

Este fallo del tribunal de apelaciones representa un nuevo revés para Jorge Glas y sus defensores, quienes siguen enfrentando un arduo camino legal en su intento por revertir las decisiones judiciales en su contra.

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